Ya no tengo FOMO, ahora tengo JOMO.
No necesito estar en todos los eventos, en todas las llamadas ni en todos los grupos de WhatsApp.
Hace tiempo eso me hubiera causado ansiedad.
¿Y si me estoy perdiendo de algo importante? ¿Y si no voy y justo ahí pasa la “oportunidad”?
Eso es FOMO, Fear of Missing Out, o en español, el miedo a perderse de algo.
Es una sensación constante de que deberías estar en más lugares y decir que sí a todo.
Es como si tu agenda estuviera secuestrada por el miedo.
Una gran causa de tu FOMO, muchas veces solo se debe a que los demás están inflando sus logros maximizando lo que realmente es algo normal.
O simplemente utilizan palabras superlativas para expresarse.
No sientas que ya te quedaste atrás si no has leído ese libro que alguien dice que está "brutal". Tal vez para el sí lo está, pero no necesariamente lo será para ti. Inclusive hasta estás haciendo bien en no irte por ese camino y leer cosas que te serán más provechosas para tus circunstancias.
¿Te mostraron fotos de una reunión "súper pro” en un restaurante a la cual no pudiste ir? Haz tu propia reunión. No necesitas validación ajena para moverte.
Hoy ya no vivo así, con FOMO. Ahora tengo JOMO.
Joy of Missing Out.
O en español “el gusto de perderme cosas”.
Porque desaparecer de la agenda de otros no significa desaparecer del mapa.
No estar en todas partes no te hace menos exitoso, de hecho, muchas veces te vuelve más claro, más productivo y más presente.
Cuando dejas de intentar estar en todo, puedes realmente estar en lo que importa.
Esto es parte de mi cruzada anti-FOMO, una emoción totalmente inútil para tus propósitos
-Yuban.