Vamos a ponernos románticos con el universo.
Supón que tienes los dientes chuecos y quieres arreglártelos.
Por mucho que medites y visualices tener los dientes bonitos esto no va a suceder. Puedes hacerlo por 10 o 15 años pero después de éste tiempo no solo seguirás teniendo los dientes chuecos sino que tu situación habrá empeorado.
Eventualmente vas a tener que dar los pasos físicos necesarios para tener tus dientes corregidos.
En otras palabras ir con el ortodoncista.
Entonces “visualizar” como único medio para activar la ley de la atracción en tu vida no te va a dar los resultados esperados. Por lo menos no en todo, porque muchos alegarán que atrajeron los $50 pesos que necesitaban para completar su gasto y sin mover un dedo. Lo visualizaron y se lo encontraron en la calle.
La vida y nuestras necesidades son más complejas que eso.
Lo que sí creo que hace la ley de la atracción en el ejemplo, es que va a pre-disponer a tu mente para estar atenta a la señal que el universo le va a proveer, para que tengas la oportunidad de arreglar tus dientes.
Sistema reticular activador ascendente, le llamarán algunos.
Entonces es más ciencia que magia, realmente.
Es como cuando quieres comprarte un carro rojo y empiezas a ver carros rojos por todos lados. Simplemente le diste la instrucción a tu cerebro para que se enfocara en eso.
Si tu cerebro tiene la instrucción de otorgarte una hermosa sonrisa, de pronto irás caminando por la calle y te topas con publicidad de una gran promoción de arreglo de dientes por sólo x cantidad al mes. Verificas que se ajuste a tu presupuesto y empiezas tu tratamiento.
Creo que eso es lo que hace la ley de la atracción:
Le provee a tu cerebro la instrucción precisa para que detecte las oportunidades necesarias y así lograr tus objetivos.
Si no das la instrucción, será incontable la cantidad de oportunidades que se te pueden estar escurriendo entre las manos. La buena noticia es que ni cuenta te darás.
Ojo que también funciona en sentido opuesto.
Por ejemplo, si todo lo que piensas es que hay crisis económica y problemas, verás crisis, falta de oportunidades y problemas por todos lados.
¿Quieres activar la ley de atracción en tu empresa o trabajo?
Lo primero que necesitas para activar esta ley a tu favor es precisión en definir lo que quieres.
No. Precisión no.
Ultra-precisión.
La falta de precisión o especificidad es uno de los grandes obstáculos que te separan de aquello que quieres.
“Quiero un carro nuevo” – le dices a tu hada madrina.
¡¿Cuál?! Hay una gran diferencia entre un Grand i10 sedán de la Hyundai y un Audi R8.
¿Le quieres dejar esa decisión a tu hada madrina que no sabe nada de carros ni de tus gustos?
En el terreno empresarial pasa algo similar.
Quieres lograr tus objetivos, pero estos son:
· Vender más.
· Reducir costos.
· Mejorar el servicio al cliente.
En los negocios no es suficiente con ambigüedades y generalizaciones como “tener un gran equipo de trabajo”.
La diferencia entre visualizar un carro y visualizar estos objetivos es la dificultad de imaginar lo que no tiene (algunas veces) una forma física.
Puedes visualizarte manejando el auto nuevo o estacionado en tu cochera.
¿Cómo visualizar vender más? ¿Cómo visualizar a tu empresa reduciendo costos?
Pudieras imaginar tu tienda llena de clientes o tu celular vibrando con notificaciones de nueva compra. Está bien.
Pero recuerda que te decía que esto no es magia.
Y el gran universo dadivoso no sabrá cuántos clientes más es “vender más”.
Ni con que cantidad de ahorro te darás por bien servido.
Para ser específicos hay que ponerle números y así sabrás si lograste el objetivo o no.
Entonces ponle un número a tus objetivos:
→ Incrementar las ventas al contado de “producto B” en un 20% al 30 de noviembre de 2023.
Es más específico y por lo tanto mayor probabilidad de que se manifieste en tu vida.
Esto sería mucho más parecido a pedir un audi r8 coupe v10 performance quattro color rojo modelo 2023 a “quiero un auto nuevo“.
Ahora, ¿recuerdas que te dije que tenías que dar los pasos físicos necesarios para que ocurra lo que quieres que ocurra?
Seguimos en lo mismo.
Lograr un incremento de un 20% de las ventas en los próximos 3 meses no va a darse por mero acto visualizatorio.
O como se diga.
Tu cerebro ya está en acción olfateando oportunidades porque ya le diste la orden.
Ahora tendrás que tomar las acciones decisivas necesarias para que esto suceda.
¿Cuáles pasos? te preguntarás.
Empieza a fijar tu objetivo de ventas específico.
Los pasos los vemos la próxima semana.
- Yuban González