A tus clientes no les interesa tu marca.
Eso de que si registras tu marca ante el IMPI queda protegida es puro cuento.
No tienes idea de la cantidad de pymes que no han podido hacer nada cuando alguna empresa con más recursos usa su imagen o nombre.
De hecho, muchas veces después de tanta vuelta y trámite resulta que ni puedes registrar tu marca y terminas realizándole cambios para que pueda por fin quedar registrada, entonces ¿no que muy original?
Mira, el otro día veía un post sobre una empresa -que más bien es un changarrito- que vende carcasas para celular. Resulta que llegó una empresa extranjera al país y se expandió rápidamente utilizando un nombre muy similar. Según los dueños del changarrito acudieron a denunciar pero no han logrado nada.
¿Sabes porqué se expandieron rápidamente? No fue por el nombre, fue por los recursos que invirtieron y la experiencia haciendo negocios, mientras el changarrito haciendo su lucha tratando de jalar el apoyo del público argumentando que la suya es una marca mexicana. Híjole, será que no soy patriota pero eso no me mueve ni tantito, yo solo quiero mi carcasa.
La verdad es que gran parte de las marcas reales del día a día no valen nada. Da igual si quitas el letrero con la marca y logo de tu paletería y en su lugar pones “ricas paletas y aguas frescas”.
Que si le quitan el nombre a TV Azteca la rebautizas como Pantalla Olmeca y listo, así como lograste colocar el primer nombre puedes volver a colocar otro.
Es más un asunto de ego. Seamos honestos, el nombre de tu negocio no es tan espectacular para tus clientes. Lo es para ti, claro.
No te desconcentres con estas cosas, eso déjaselo al CEO de PepsiCo o Unilever.
Muchos defienden con garra que registrar la marca es “el primer paso para empezar un negocio”. Se ofenden cuando digo que no es importante, por lo menos no al inicio.
¿Qué marca vas a registrar si aún no tienes ventas? o peor aún ¿con qué dinero? Mejor usa esos recursos para publicidad.
Lo irresponsable no es dejar el registro para después. Lo irresponsable es perder meses, dinero y energía en un trámite que quizá ni siquiera proceda, mientras tu negocio se muere por falta de ventas.
A ti y a mí lo que nos conviene es vender.
Sobrevivir es el nombre del juego en un inicio. Ya después si demuestras carácter y resultados, entonces ya serás digno de proteger una marca que realmente valga dinero.
- Yuban


