No subestimes esta habilidad de liderazgo.
El carisma, es una habilidad que te permite salirte con la tuya en muchas situaciones.
Piensa en Steve Jobs, él constantemente usaba la palabra bozo para describir a sus empleados –una persona incompetente, insignificante, tonta- y aun así la gente quería seguir trabajando con él. Aunque claro además del carisma, todos queremos ser parte de algo más grande que nosotros. Nos da status.
Bien, no estoy sugiriendo que si eres una persona carismática insultes a la gente sin consecuencias. Si yo les digo bozos a mis colaboradores no lo dudarán ni tantito en irse de la empresa.
Lo que sí sugiero es que la gente escucha más a una persona carismática que a una que no lo es. El carisma hace que proyectes competencia y la gente quiere estar al lado de una persona competente. Funciona como un imán que atrae hacia ti a las personas más ambiciosas.
Ok ya te escuché, no sientes que tienes carisma. No temas, hay solución.
El carisma es una habilidad y como toda habilidad se puede aprender. Inclusive si no eres una persona que encajes en el molde de “atractiva”.
¿Cómo puedes mejorar tu carisma?
Camina erguido y con paso seguro como si supieras a dónde vas. La ropa demasiado holgada como la de Bad Bunny no le ayuda a nadie. A nadie. Lo contrario tampoco se ve bien. Mantén contacto visual empático, no como lo haría un psicópata. Hazte un buen corte de pelo. Usa una buena loción, no de esas que se venden por catálogo. Usa tu sonrisa y no escondas las manos sino muéstralas en expresiones abiertas. Ten un genuino interés por los demás.
Como puedes ver, todo esto es algo que puedes hacer y que está dentro de tus posibilidades independientemente de los atributos o no que la vida te haya dado al nacer.
- Yuban.